PARKER Y KRISTINA. LA HISTORIA DE UN AMOR. CAP. 213

Buenas noches, hemos llegado al penúltimo capítulo. Espero que lo disfrutéis.

Gracias.

Un abrazo.

DOS MESES DESPUÉS

—¡Parker por favor puedes elegir de una vez! —la reñía divertida Electa, aunque ya a esas alturas un tanto harta.

—Mamá no sé… no sé… —repetía nerviosa mirándose en el espejo.

—Te vas a casar, has tenido dos meses para escoger y ahora de pronto te entra el pánico con no sé, no sé… ¿Qué es lo que pretendes? ¿Ir más escotada? Que llamemos a una ambulancia para Kristina.

—Mama Parker es un bombón —dijo divertida Connie.

—¡Qué! —la mirada de Parker como la de Isabella y Electa fueron de sorpresa—. ¿Quién ha dicho eso?

—Mama Kris a tía monstruita le dijo que mamá Parker era un bombón rico para comerse poquito a poco.

—¡La virgen! —exclamó Oliver.

—No creo que sea buen momento ahora, Oliver, la virgen precisamente ahora, no —apuntó Isabella de manera graciosa.

—Hacía así —y Connie imitaba a Kristina con los ojos cerrados y poniendo morritos.

—¡Anda, Connie, déjalo! —le dijo Isabella muerta de risa como la niña.

—Bombón —susurró Parker.

—¡Ay, hija, sí ha dicho que eres como un bombón! Si con ese escote no te es suficiente… entonces es que no valoras la vida de tu futura esposa y quieres enviudar antes de casarte.

—¡Mamá!

Era como que en ese momento reaccionara ante todo, ante las palabras de Connie y sus gestos divertidos, las burlas de Electa y sus risas, las carcajadas de Isabella y las lágrimas de Oliver. Todo cobró sentido para ella que terminó riendo y llorando al mismo tiempo lo que provocó que Electa bramara de manera divertida:

—¡Lo que yo diga! Menudo dramón de boda.

Habían pasado dos meses repletos de vivencias increíbles. Se había estrenado el corto con un gran éxito no solo en Estados Unidos, también llegó a Europa, participaron en los principales festivales de cine, siendo uno de los cortos más premiados. Volvieron a recibir premios por su trabajo, así como mejor productora ya que su apuesta había sido muy fuerte por un tema demasiado duro que a menudo la gente solía mirar hacia otro lado. Estaban ya completamente metidas con los ensayos del guion de la serie «Presidenta, un mundo de traiciones». Sam y Nathalie disfrutaban con el trabajo de ver como se iba dando vida a una serie, tanto fue así, que Nathalie decidió darse un respiro en su trabajo y dedicarse junto a Sam, en cuerpo y alma, a trabajar en la productora que con el corto ya había obtenido beneficios. Y tal como habían comentado, habían donado un diez por ciento de ellos para el Santuario de animales. Mientras recibían premios, comenzaron a grabar nuevamente en la serie «Familia y Rivales», aquello que había empezado como una prueba de éxito o fracaso, los números y las redes volvieron a demostrar que en tan solo dos capítulos la audiencia se había duplicado con ellas. Eran las nuevas estrellas de la serie barrían en las redes y volvían a ganar semana tras semana como la mejor pareja. A Anna se la llevaban los demonios, tanto fue así que no cesaba de criticar a la pareja siempre que tenía ocasión, sin embargo, cuanto más la criticaba, más caía ella en popularidad. Mónica no volvió a tratar ningún tema con ellas, Hunter prefirió que Allen fuera la encargada de la cadena en llevar solo el tema de Parker y Kristina. La propuesta de hacer una serie en la que se pudiera contar la historia de Addison y Kate en su vida cotidiana tomó fuerza, y Rachel fue la encargada de preparar la serie que tendría capítulos de media hora, pero había prometido que serían intensos. La felicidad en la pareja cuando salieron para anunciar su próxima aventura en la serie de la que serían protagonistas quedó retratada por Liz, sus rostros no podían mostrar más alegría ante lo que iban a vivir sabían que de una manera intensa. (Autora: Luz ldana)

Por parte de la familia, todos disfrutaban los domingos de una comida en la que se reunían y eran completamente felices, con la llegada del verano, se animaban a bajar a la playa a bañarse, Suzanne le perdió el miedo, aprendió que le gustaba jugar con las olas siempre acompañada por Parker y Kristina. Connie había mejorado mucho con Lana, prácticamente eran pocas las veces que se llevaba el dedo a la nariz. Aunque sus dibujos demostraron tal como Lana había avisado que su trauma estaba demasiado interiorizado. Por esa razón, tuvieron que trabajar con ella y Margaret de una manera más intensa para que dejara de depender de los demás y aprendiera a ser capaz de mantener su atención. Aunque lo que más les preocupaba era el terror que sentía a perder a su hermana. Al igual que Suzanne iba a necesitar mucho tiempo de terapia para poder superar lo sucedido. La mayor seguía con sus pesadillas que eran mitigadas por Parker o Kristina, se dejaba abrazar por ellas, por Isabella y cuando nadie veía a las dos tipas duras que eran ella y Electa, que ya llevaba trencitas, se daban abrazos divertidos. También la llegada de los distintos gallos, salvó a la familia de soportar el olor de las diferentes comidas que le forzaba a tomar Connie para que estuviera fuerte como ella.  (Autora: Luz ldana)

Milagros por su parte, tuvo la oportunidad de poder enterrar a su madre en el cementerio de la ciudad. Micaela conocía la asociación que buscaba a las personas fallecidas y la madre de Milagros había cuidado todos los destalles al ponerse su nombre colgado del cuello y en los papeles de su pantalón cuando fue encontrada. Costó mucho, pero las abogadas de la pareja lograron que días antes de la boda pudieran oficiar una misa y el entierro. Margaret les había dicho como actuar, sin embargo, la niña sorprendió a todos con una madurez impropia de su edad, lo que mostraba lo mucho que su madre la había preparado para ese momento. Milagros se acercó al ataúd, y con una calidez que provocó en la pareja un llanto incontrolado le dijo:

—Mamá, estoy muy bien, las nuevas mamás me cuidan mucho, ahora tengo hermanas, abuelas, abuelos, tías y hasta primos. Ya no estaré sola nunca más y te llevaré en el corazón como me dijiste. Te quiero, mami. (Autora: Luz ldana)

Como lo dijo en español, Parker trató de traducirle a Kristina aunque la emoción se lo puso difícil. Aquel momento fue intenso, pero Milagros estuvo acompañada por Suzanne y sus madres, sus abuelas y abuelos, sus tías, Nathalie, y hasta Micaela que lloró pensando en cuantos niños no conseguían tener un futuro como el que Milagros iba a tener junto a la pareja. Aquel acto hizo que una parte de Parker y Kristina pudiera estar en paz con aquel pensamiento de alivio que sintieron al saber que había fallecido. Le pidieron perdón y le prometieron que a Milagros nunca le faltaría el amor, ni el recuerdo de su madre. Al final se fundieron en un abrazo emocionado pensando en que desde el lugar que estuviera, les habría perdonado. Además, habían creado una fundación que abarcaba desde ayudar a los niños que llegaban al país, así como al maltrato y abuso infantil. (Autora: Luz ldana)

Por su parte, en la residencia, Everly estaba arropada entre aquellas paredes. Había cumplido su promesa de no molestar a Parker, y Electa había cumplido su palabra de no visitarla. Vivía modestamente, se compraba libros sobre la muerte, era como una obsesión. Paseaba por el jardín e iba a misa. Alguna vez, salía a comprar algo en una tienda de alimentación cercana, pero aunque la residencia era lujosa, ella había dejado toda su ropa y sus joyas que guardó como herencia para Parker. Una vez al mes había ido Isabella para saber si necesitaba algo, y una de las dos veces que fue, se sorprendió:

—¿Puedes sentarte un momento Isabella? (Autora: Luz ldana)

—Claro —se sentó en uno de los dos sillones orejeros que había en aquel pequeño bungalow.

—¿Crees que me perdonará Dios?

Isabella guardó silencio. (Autora: Luz ldana)

—Vivo atormentada con mi muerte y lo que pasará después. Por lo que hice.

—No sé lo que hay después de la muerte, Everly, trata de perdonarte tú aquí en esta vida, es lo único que te puedo decir.

Everly la miró fijamente.

—Es que no me puedo perdonar. (Autora: Luz ldana)

—¿Qué necesitas para poder perdonarte? —en el fondo sentía pena por una mujer que había hecho un daño infinito a las personas que más quería, pero la culpabilidad estaba tan marcada en su rostro, su cuerpo, que no pudo evitar ese sentimiento.

—Un imposible… —Isabella la invitó a hablar—. Que Parker me perdone de corazón.

—En ese caso, morirás en paz.

—¿Qué quieres decir? —la miró con un pequeño brillo en sus pupilas. (Autora: Luz ldana)

—Parker, para tu suerte, no tiene tu corazón.

—Es cierto, tiene el de mi hermana.

—Algún día, cuando ella misma pueda sentir que te ha perdonado de verdad, vendrá —lo dijo con total sinceridad.

—Rezo para que así sea. (Autora: Luz ldana)

—Hasta la mala gente tiene una segunda oportunidad, estoy segura que tú la tendrás.

—Voy a decirte algo que… —se detuvo, cerró los ojos y al abrirlos miró a Isabella con una tristeza profunda—. Siempre me sentí inferior a mi hermana, la envidié, envidié su fuerza, su corazón, su valentía… Mi madre me aterraba, me crió a base de golpes, aprendí eso y traté a Electa de igual manera, luego lo hice con Parker. Cada vez que las veía juntas, sentía una furia brutal, yo nunca tendría el amor limpio que Parker sentía por su verdadera madre, ni tampoco tendría la valentía de reconocer mis errores como hace mi hermana. Mi vida ha sido una mentira, he pasado por este mundo haciendo daño a los demás, sobre todo a quien no lo merecía. Odiaba a mi madre, la odiaba con todas mis fuerzas, así que entiendo que Parker me odie porque sin querer fui como ella. (Autora: Luz ldana)

—Parker no te odia. Esa capacidad de odiar no existe para ella.

—No la viste como me habló —se formó un puchero en su barbilla que la obligó a agachar la mirada.

—Te habló desde el dolor, la rabia, la decepción que es mucho peor que el odio, créeme.

Hubo un momento en el que el silencio fue espeso. La luz del sol entró por la ventana y pareció deshacer tanta densidad de dolor y tristeza.

—¿Por qué vienes, Isabella? Te he tratado siempre fatal. (Autora: Luz ldana)

—Vengo porque como te dije antes, todos merecemos una segunda oportunidad, pero sobre todo vengo, porque quiero proteger a mi mujer que es lo que más me importa en el mundo.

—¿Protegerla de mí? (Autora: Luz ldana)

—No, protegerla de ella misma. De la rabia que siente hacia ti. Poder decirle que estás cambiando le ayuda. Y yo a diferencia de ti, lo único que quiero en la vida es verla feliz, porque es el gran amor de mi vida —le sonrió—. Perdónate de corazón y entonces conseguirás lo que tu alma busca. (Autora: Luz ldana)

Cuando Isabella se fue Everly rompió a llorar mientras susurraba:

—Parker. (Autora: Luz ldana)

Día tras día esperaba la llegada de Parker, y el conjunto de esos días le sirvieron para ir viendo todos sus errores a lo largo de la vida, tal como le dijo Isabella a quien quería hacerle caso, el primer paso para recibir el perdón de Parker, era perdonarse a sí misma por todos los horrores que había cometido porque su alma que era lo que realmente le atormentaba buscaba la presencia de Parker. Y allí en aquel momento tan solo podía tenerla mirando el retrato de una de sus fotografías preferidas o sintiéndose orgullosa cada vez que veía su éxito en las redes. (Autora: Luz ldana)

La casa de la playa se había convertido en un fortín, pero eso no significaba que no salían, lo hacían con la furgoneta con los cristales oscuros y paseaban a las niñas por lugares pocos transitados. Hasta ese momento, habían logrado evitar que nadie pudiera fotografiarlas. El día antes de la boda sentadas las cinco en el sofá tuvieron que darles una explicación ante lo que iba a ocurrir, porque la pareja había decidido que en esa familia todo se hablaría formando un círculo para poder hablar todas.

—¿Entonces nos perseguirán? —preguntó Suzanne.    (Autora: Luz ldana)

—No, cariño, vamos a presentaros mañana con una fotografía, y trataremos de llevar una vida lo más tranquila posible para que vosotras no os veáis mezcladas con nuestra parte de fama.

—A mí no me molestaría —dijo divertida Milagros—. Me gusta cuando os veo en las alfombras.

—Eso está bien —dio una carcajada Parker—. Pero no siempre es agradable, por eso hemos estado trabajando con Margaret.

—A mí tampoco me importa —respondió Suzanne.      (Autora: Luz ldana)

—Ni a mí —elevó los hombros Connie—. Ni a gallo.

—¡Bendita inocencia! —susurró Micaela que pasaba por allí con un montón de servilletas blancas y dobladas.

—Lo que queremos es que sepáis que vamos a intentar que las cosas sean lo más sencillas posibles dentro de la diferencia.

—Pero, mamá Kristina, vamos a ver, Suzanne y Connie son negras, yo soy latina y vosotras sois blancas… ¡Somos diferentes pero familia!

—Quizá nosotras estamos haciendo más problema del que es —le dijo Parker a Kristina.

—Sí —dijo Suzanne.        (Autora: Luz ldana)

—¿Sabéis qué? Tenéis razón, ya es hora de presentaros en sociedad y que todo el mundo sepa lo mucho que os queremos.

—Ves como es fácil —dijo Connie—. Somos un abrazo de amor.

Parker y Kristina se miraron transmitiéndose ese temor que tenían a que pudieran hacerles daño, un temor que habían trabajado con Margaret conjuntamente.   (Autora: Luz ldana)

—Niñas a la cama que mañana vuestras madres se casan —les había dicho Electa que apareció en casa.

—Mamá, ¿qué haces aquí? —la miraba boquiabierta Parker.

—¿Qué voy a hacer? —elevó los hombros diciendo como si fuera evidente—. Secuestrarte.

—¿A mí? —la carcajada de Kristina fue acompañada por las de las niñas.  (Autora: Luz ldana)

—Pues claro, ¿qué pretendes dormir con tu novia? ¡Eso no es así! Esa no es la tradición familiar.

—¡Ay, por favor! —Kristina no paraba de reír.

—¿Qué te hace tanta gracia? Porque a mí, gracia, ninguna —se quejó Parker.  (Autora: Luz ldana)

—Tú me haces mucha gracia, tu cara…

—Venga… dales besos a las niñas y va.

—¡Pero cómo que va!            (Autora: Luz ldana) 

—Que nos vamos a dormir tú y yo a la habitación de la calma. Juntas en la cama te voy a atar para que no te escapes.

Y ahí Kristina dio una carcajada tan grande que arrancó otra a Parker. Era graciosa, ver a Electa con las trenzas de Suzanne con gesto serio y las manos puestas en las caderas.

—No sé cómo puedes aguantarte la risa —le decía Kristina.  (Autora: Luz ldana)

—¿Quién dice que tengo ganas de reírme? De lo que tengo ganas es de que os caséis y me dejéis vivir —protestó como era costumbre en Electa de manera divertida provocando las risas de las niñas.

—¡Será posible! —volvió a quejarse Parker.

—Mamá Parker con la abu, mamá Kristina con nosotras, también la ataremos, abu —dijo Connie.

—Si es que me las como, ¡me las como! —decía graciosamente.    (Autora: Luz ldana)

—Te quiero, mi amor —le dijo Kristina dándole un beso.

—Te quiero… voy a echarte de menos. Sobre todo con lo que ronca mi madre —bajó la voz para decirlo.

—¡Yo no ronco, niña! —le riñó.

—Hasta mañana —le dijo Kristina sonriendo.       (Autora: Luz ldana)

—Ay…

Y el día siguiente, llegó con el sol iluminando el cielo, el azul del mar, el verde de la hierba, los árboles, todo era colorido. Y acompañado por el piar de los pájaros. La alegría se contagiaba desde cada persona de esa casa a la naturaleza y al contrario.

Kristina estaba en el cuarto de matrimonio vistiéndose, lo hacía con tranquilidad sin estar demasiado nerviosa, Alexis la miraba algo extrañada porque pensó que ese día estaría más alterada. Milagros y Suzanne estaban con ella observando como se vestía. La miraban sonriente mientras intercambiaban frases en voz baja entre susurros. Habían visto con atención como la maquillaban como peinaban su larga melena con algunas ondas que dejó a las niñas boquiabiertas por cómo lo hicieron. Mary y la jefa de peluquería que habían aceptado trabajar con ellas en la productora, ese día habían ido para hacerle los arreglos con la complicidad y el secretismo que ellas quisieron que hubiera. Sam entró con una gran sonrisa al ver lo resplandeciente que estaba el rostro de su hermana.   (Autora: Luz ldana)

—¿Cómo lo llevas, hermanita?

—Bien, Sam.

—Yo creo que demasiado bien —agregó Alexis con gesto un tanto atónito.

—Me voy a casar con Parker —respondió Kristina con clarividencia.   (Autora: Luz ldana)

—Por eso, una en el día de su boda está nerviosa.

—Mamá, Parker y yo estamos muy bien, somos pareja y esto es un trámite.

—¡Ahora dímelo para que me lo crea! —soltó Nathalie, que para las niñas era como Electa, el nexo de la diversión.

—Nathalie… estoy bien —Mary la miró sonriendo.

—¡Qué te vas a casar con mi Parker!      (Autora: Luz ldana)

—No es tu Parker, es MI Parker.

—¡Pero te vas a casar con ella mala zorra! —le gritó y Alexis puso gesto de alerta por las niñas que dieron una carcajada.

—¿Te crees que no lo sé? Llevo un vestido de novia y tengo unas damas de honor que están guapísimas —les dijo a las niñas que sonrieron.

—Y te vas a casar con Parker —se sumó a la conversación Sam.  (Autora: Luz ldana)

—Espera… me voy a casar —entonces se sentó de golpe en la banqueta.

—¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh amiga… qué no te habías enterado aún! —la burla de Nathalie hizo que todas dieran una carcajada—. Y por eso te has puesto ese vestidito de escote palabra de honor, para que tu mujer se vuelva turuleta cuando te vea porque querías estar divina, sexy, arrebatadora.

—Nathalie —le llamó la atención por lo bajo Alexis, aunque las niñas no paraban de reír.

—Alexis, mis monstruitas ya saben que sus madres se adoran y son muy pasionales, ¿verdad?

—Sí, siempre están igual, abrazadas, dándose besos, la una encima de la otra…  (Autora: Luz ldana)

—Ves —Nathalie elevó los hombros con gracia—. Bueno… ¡qué! Espabilas o me caso yo.

—Hoy va a ser el día más feliz de nuestras vidas —susurró sonriente.   (Autora: Luz ldana)

—Mamá Kristina —se acercó Milagros—. Hoy va a ser el día más feliz de las cinco, porque hoy somos ya una familia para todo el mundo, y nadie podrá separarnos jamás.

Aquellas palabras de la niña lograron que Kristina se emocionara.

—¡No llores! —le dijo Alexis.

—Si es que soy muy feliz, ven Suzanne.      (Autora: Luz ldana)

—¡Oh, pobre Suzanne! Ella manteniendo la distancia del drama y tú la llamas —le dijo Sam sonriendo.

—Ya la conozco —dijo la pequeña que sonreía mucho más.

—Quiero deciros que hoy es un día muy feliz para todas, es cierto, que Milagros tiene razón, y que nadie nos va a separar. Quiero daros las gracias por elegirnos como vuestras madres, sois lo mejor que tenemos juntas y sois terriblemente culpables de nuestra felicidad y la de toda la familia. Os quiero con toda mi alma y Parker también.

—¡Qué bonito! Si estuviera Electa te diría que esto es la doscientas sesenta y siete parte de La casa de la pradera.           (Autora: Luz ldana)

—¡Oh, Nathalie cállate! —le dijo Kristina haciendo reír a las niñas.

—Maldita seas te vas a casar con mi Parker —respondió la otra haciendo reír nuevamente a todas.

—Sois un caso —dijo Alexis negando con la cabeza mientras Kristina se ponía en pie y todas le arreglaban el vestido.

—Nosotras también somos muy felices, mamá Kristina.      (Autora: Luz ldana)

Aquella frase de Suzanne erizó la piel no solo de Kristina.

—Ven aquí, mi amor —la abrazó emocionada—. Ven, Milagros, cariño. Quiero que sepáis que sois lo mejor que nos ha pasado en la vida. No hay nada mejor que vosotras tres y eso nos hace muy felices y gracias a vosotras puedo casarme con Parker.

—¡Eso ya lo has dicho! ¡Dos veces! —decía muerta de risa Nathalie.

—Os queremos mucho —respondió Milagros.

Suzanne le dio una piedra mágica que Kristina cogió emocionada.    (Autora: Luz ldana)

—¡No llores! —le gritaron todas a la vez.

8 comentarios en “PARKER Y KRISTINA. LA HISTORIA DE UN AMOR. CAP. 213

  1. Thank you for your well wishes, Mary. It’s hard to let them go, when today I put an end to it I was left empty. It usually happens when you write something that excites you. The characters accompany you in a thousand more stories in your head, it happened to me and happens to me with Esther and Maca. I’m going to miss you for sure, now I want to dedicate myself more to my projects, and without expecting it, you are showing me that it is a couple that you like and I thought you would be bored with my stories. I do not separate myself from them, from any of the characters about whom I have written fan fics. They mark and stay a little on me. If my health permits, I will return here, of course. Thank you very much, I feel very lucky with your support.

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  2. Hi

    i think you know me well enough I don’t give up easily; fought long and hard with GH to bring Ashley back and continue the storyline. When that was evident it wasn’t going to happen I switched to B&B and have bren pestering them to being Ashley back. She’s always been my favorite in every character she plays. Not only beautiful but an amazing actress that is underrated!

    i’ll be praying you miss P&K enough to want to write another story 🙏🏻🤞🏻. Your stories are the best b/c they are classy just like Ashley & Lexi❤️

    Good luck with your novel

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  3. Hello Mary.
    It makes me happy that my stories help you, that is precisely why I write and that is the reason that moves me to do it. I’m going to stop because I have my novel project and I need a lot of time to dedicate myself to it at my own pace. Later, when I finish I have committed to a story about Esther and Maca other characters. I don’t know what the future will hold for me, and it is true that Parker and Kristina have also made a big impact on me and I owe them a lot, but as you say, my illness forces me to take long breaks to recover, I can’t write every day. Therefore, I have decided that I am going to finish my stories for the blog to focus on something else. Maybe, as happened to me with Esther and Maca, one day I will feel the need to write about Parker and Kristina again, but since I am not sure I can, I prefer to close its cycle with this story. It hurts me that they were not able to have the opportunity to continue showing the chemistry and talent they share together. A hug, and they will always be here to read them. And thank you very much again for reading and giving so much love to my stories

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  4. You have given Parker & Kristina (and Ashley & Lexi) a great honor through your stories🙌🏻 Something GH couldn’t or wouldn’t do. You were able to keep our interest always, even in this last one where you paused for quite awhile. Picked up as exciting as ever, characters are wonderful!
    I know you said you’re done writing about them and will leave their stories online. I guess I don’t recall the reason why? Is it because of your health? I’m sorry if Iban overstepping but your stories do do much for me when I need a break from everything including TV. The other fan fiction doesn’t compare; no real storyline or building of the relationship like you do. It’s fascinating when Kristina comes to the realization how she feels about Parker.

    Is there any chance after taking a break from writing about them, you may do another P&K storyline?

    I hope you are feeling better; take care

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  5. ¡Ay, Luisa! Ja ja ja. Pues habrá sido un maratón de cuidado porque mira que he escrito. Me alegra saber que te ha llegado todo aquello que quería compartir, y no sabes lo que me ha costado escribir el capítulo final. Espero que merezca la pena. Gracias por tu comentario, por tu apoyo, y por tantas risas compartidas. Un abrazo.

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  6. Madre mía de mi vida el penúltimo capítulo …yo con mi maratón de lectura ( no me había enterado que habías vuelto a escribir los capítulos de esa historia) llego justo a la publicación del penúltimo capítulo!
    Que decir Luz esa historia es inmensa increíble fantástica llena de emociones brillante para partirse de la risa …puedo seguir por horas describiendo lo que has sido capaz de transmitir con tus palabras.
    Como siempre reafirmo …eres mi escritora favorita! Y espero con muchas ganas el capítulo final !

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